Friday, August 29, 2014

El pecado está en parir?

¿El pecado está en parir?
Asistencia Social se lava las manos con una familia compuesta por madre
soltera y cuatro hijos que viven en condiciones miserables
jueves, agosto 28, 2014 | Red Cubana de Comunicadores Comunitarios

LA HABANA, Cuba, Juan Carlos Díaz Fonseca.- Dadira Mora Jabalera, de
Guanabacoa, es madre de cuatro hijos, asmáticos todos. Sus vástagos se
nombran Daniel (7 años), Adebleris (5), Melody de la Caridad (1 año y
medio), que también padece de epilepsia; y Melany Daniela, de 3 meses de
nacida, que ha estado ya ingresada 4 veces en el hospital "William
Soler". Los niños son hijos de tres hombres.

Para la tercera bebé se destinó, por parte de una trabajadora social,
una plaza en un Círculo Infantil. La niña, sin embargo, no puede asistir
por su patología, ya que en el círculo no la admiten. No obstante,
Dadira tiene que pagar el importe mensual.

Dadira alega tener problemas con su vivienda. Está en condiciones
críticas, es un cuarto de 4 metros de largo por 3 de ancho, de madera,
techo de zinc con filtraciones. No posee efectos eléctricos como
refrigerador o televisor, por lo que en ocasiones tiene que botar los
alimentos y la leche de sus hijos. Los muchachitos no tienen algún
entretenimiento dentro de este tenebroso local, aunque ella conserva
como un objeto de museo un televisor viejo roto, en blanco y negro.
El baño, que es una letrina, se encuentra a cinco metros del cuartico.

Ella plantea que se ha dirigido a todas las Instituciones
gubernamentales que se ocupan de ello, solicitando ayuda por las pésimas
condiciones de vida que presenta, así como su situación económica, y no
ha recibido solución. Solo el Círculo y desafortunadamente no lo puede
utilizar.

Con el fin de solicitar una prestación social a través de una
"chequera", como se conoce en Cuba a las ayudas sociales, se dirigió al
Jefe de los Trabajadores Sociales del municipio, de nombre Lázaro, el
que le respondió en forma descompuesta: "¿Quién te mandó a parir tanto?".

Al ver que no le daban solución, decidió hablar con la responsable de
Asistencia Social, de nombre Lucía, quien alegó que ese no era su problema.

Así vive esta familia desde hace 4 años en Cadena #3-A entre H y Final,
en ese cuartucho que ha hecho que todos los niños enfermen, y no ha
recibido una solución satisfactoria a su problema.

El lugar pertenece a la madre de Dadira y ella teme que en cualquier
momento la pueda sacar de allí.

Esta historia de miseria total se ha convertido en algo que se repite
muchas veces en la sociedad cubana.

Source: ¿El pecado está en parir? | Cubanet -
http://www.cubanet.org/noticias/el-pecado-esta-en-parir/

Peligroso balón de gas a punto de ocasionar tragedia

Peligroso balón de gas a punto de ocasionar tragedia
[29-08-2014 11:02:46]
Sergio Girat Estrada

(www.miscelaneasdecuba.net).- La Habana. -Trabajadores de la funeraria
Calzada y K, dejaron caer un balón de gas desde la azotea del inmueble,
provocando pánico entre los presentes.
El hecho ocurrió en el municipio Vedado próximo a la Sección de
Intereses de los EE.UU sobre las 7 y 50 am, del pasado martes 20 de agosto.

El supuesto accidente ocurrió cuando cayó un balón de gas de forma
inexplicable- a más de 40 metros de altura- ante varios activistas que
se encontraban en el lugar, lo que originó un gran revuelo entre las
personas que se encontraban tramitando visas en la embajada estadounidense.

Esto ocurrió en los bajos de la funeraria, donde se reúnen disidentes,
periodistas independientes y blogueros, que asisten a los centros de
Internet que brinda la (SINA).

"Si me cae en la cabeza me mata", exclamó el periodista Alejandro
Hernández Cepero que estuvo en el lugar de los hechos y se mostró muy
consternado por lo ocurrido.

Dos agentes policiales que se encontraban en las cercanías con número de
placa 03569 y 04989 no intervinieron ante el trabajador de la funeraria
a quien supuestamente se le desprendió el balón de gas. Al no realizar
ningún trabajo investigativo sobre el hecho, surgiero dudas e
interrogantes entre los transeúntes que presenciaron los hechos.

Según activistas y periodistas presentes que se encontraban en el lugar
del incidente reconocieron que el hecho fue premeditado y con mala
intención. En el siniestro no hubo lesionados gracias a la rapidez con
que actuaron las personas que se encontraban allí. Casos como estos no
deberían pasar impunemente sin ser sancionados por las autoridades
competentes, ello pudo haber ocasionado una tragedia mortal. ¿Que se
cayó accidentalmente? Esperemos que la entidad administrativa del centro
tome medidas por lo ocurrido.

Source: Peligroso balón de gas a punto de ocasionar tragedia -
Misceláneas de Cuba -
http://www.miscelaneasdecuba.net/web/Article/Index/540041b63a682e130ca44590#.VABl0vmSwx4

Cuatro niños que merecen vivir mejor

Cuatro niños que merecen vivir mejor
[29-08-2014 11:33:42]
Juan Carlos Díaz Fonseca
Red Cubana de Comunicadores Comunitarios

(www.miscelaneasdecuba.net).- Dadira Mora Jabalera es una guanabacoense
que reside en Cadena #3-A entre H y Final, madre de 4 hijos, asmáticos
todos y además uno también padece de epilepsia; y el más pequeño de 3
meses, ha estado ingresado cuatro veces en el hospital William Soler.
Para la tercera bebé se le destinó por parte de una trabajadora social,
una plaza en un Círculo Infantil, pero la niña no puede asistir por su
patología, ya que en el círculo no la admiten. No obstante Dadira tiene
que pagar el importe mensual del Círculo.

Dadira alega tener problemas con su vivienda que se encuentra en
condiciones críticas, es un cuarto de 4 metros de largo por 3 de ancho,
de madera, techo de zinc con filtraciones. No posee efectos eléctricos
como: refrigerador o televisor, por lo que en ocasiones tiene que botar
los alimentos y la leche de sus hijos. Los muchachitos no tienen algún
entretenimiento dentro de este tenebroso local, aunque ella conserva
como un objeto de museo, un televisor viejo roto, en blanco y negro.

El baño, que es una letrina, se encuentra a 5 metros del cuartico.

Ella plantea que se ha dirigido a todas las Instituciones
gubernamentales que se ocupan de ello, solicitando ayuda por las pésimas
condiciones de vida que presenta, así como su situación económica, y no
ha recibido solución, solo el Círculo y desafortunadamente no lo puede
utilizar.

Con el fin de solicitar una prestación social a través de una chequera,
como se emiten en el país, se dirigió al Jefe de los Trabajadores
Sociales del municipio, de nombre Lázaro, el que le respondió en forma
descompuesta: "¿Quién te mandó a parir tanto?

Al ver que no le daban solución decidió a hablar con Lucía, la
responsable de Asistencia Social, quien alegó que ese no era su problema.

Así vive esta familia desde hace 4 años, en ese cuartucho que ha hecho
que todos los niños se enfermen, y no ha recibido una solución
satisfactoria a su problema. El lugar pertenece a su señora madre y ella
teme que en cualquier momento la pueda sacar de allí.

Esta historia de inhumanidad y bajo nivel de vida, se ha convertido en
algo que se repite muchas veces en la sociedad cubana.

Source: Cuatro niños que merecen vivir mejor - Misceláneas de Cuba -
http://www.miscelaneasdecuba.net/web/Article/Index/540048f63a682e130ca44594#.VABl5fmSwx4

Aquellas posadas

Aquellas posadas
CAMILO ERNESTO OLIVERA | La Habana | 29 Ago 2014 - 8:09 am.

Todo cubano mayor de 40 años recuerda aquellos hotelitos más o menos
precarios a los que acudían las parejas. Hoy son cuarterías o refugios
para damnificados de huracanes.

Primeramente fueron llamados "Albergues INIT", porque eran administrados
por el entonces nombrado Instituto Nacional de la Industria Turística.
Sin embargo, los cubanos les pusieron el nombre por el que aún siguen
siendo recordados: posadas.

En su concepción original, las posadas eran sitios para pernoctar cuando
se llegaba a la ciudad a realizar algún tipo de gestión que requería de
días. También eran lugares para parejas que buscaban un espacio para
estar a gusto unas horas.

La mayoría de los hombres que no poseían una vivienda buscaban el modo
de convencer a sus ocasionales o estables parejas para ir a una posada.
En esa etapa, alquilar una habitación en el Hotel Habana Libre (antiguo
Hilton) costaba alrededor de 22 pesos cubanos la noche. Pero en los años
70 y 80, 22 pesos era algo duro de conseguir.

Generalmente, las mujeres le hacían cierto rechazo a la idea de ir a las
posadas. Si eran muy jóvenes, tenían miedo a ser reconocidas por alguien
del barrio o la escuela. Si eran más adultas, ponían cierto reparo ante
la higiene en las habitaciones y los huecos en las paredes. Era latente
el peligro de infectarse con cierta clase de bichos francamente
indeseables, los denominados caránganos.

Igualmente era recomendable revisar las paredes y en especial la puerta.
Los huecos, y los correspondientes mirones, parecían formar parte del
inexistente servicio al usuario.

Desde mediados de la década de los 80, las posadas empeoraron aún más.

Quien se lanzaba a la gran aventura de visitarlas, sin estar debidamente
preparado, podía correr ciertos riesgos. Hay quien tuvo que lidiar con
una habitación cuya cama estaba sostenida por cuatro ladrillos. También
era posible encontrarse con colchones con más huecos que el paisaje lunar.

Los fines de semana eran complicados para reservar cuarto. Las filas
para hacerlo resultaban largas y tediosas. Era común pagar diez o
incluso veinte pesos para entrar más rápido. El posadero manejaba aparte
dos o tres habitaciones para alquilarlas a quienes pagaban el
sobreprecio. Como valor añadido, existía la posibilidad de que el
colchón, la cama y la sábana fueran nuevos o al menos la sábana
estuviera limpia.

Generalmente, la habitación tenía un pequeño baño donde nunca había
agua. A un costado, dentro de este, se hallaba un recipiente más o menos
idóneo para colectarla. El preciado líquido se buscaba al final del
pasillo en un tanque o, con suerte, se tomaba de un grifo.

El destino de las posadas, al menos en La Habana, cambió definitivamente
después de la llamada "tormenta del siglo", en marzo de 1993. Para esa
época, la mayoría se hallaban en manos de las municipalidades del Poder
Popular. Algunas estaban en mal estado, sobre todo por problemas de
filtraciones y humedad en las paredes. Sin embargo, rápidamente, los
antiguos albergues se convirtieron en casas de vivienda para damnificados.

"Al principio, tuvimos que poner un cartel en la entrada: 'Esto ya no es
posada, aquí viven familias, no moleste'", narró a este reportero, hace
un tiempo, un inquilino de la antigua posada Venus, cercana a la
Estación Central de Trenes de La Habana.

"Es que las parejas llegaban aquí, borrachas o 'arrebatadas', pidiendo
ver al carpetero. Gritaban: '¡posadero, dame un cuarto que estamos locos
por ya tú sabes!' Y ese show con niños chiquitos, personas mayores
viéndolo, tremenda pena… pero ya todo eso pasó."

Aunque en la capital han desaparecido las posadas, hay otras ciudades
del país, como la oriental Holguín, que conservan tal modalidad de
hospedaje. En esa capital provincial, el Gobierno logró destinar, años
atrás, un presupuesto para la reparación básica de antiguos hoteles en
el área urbana, como el Majestic y el Turquino. Lo más llamativo es que
se conservó el pago en moneda nacional (CUP) por el servicio.

En Santa Clara, el amplio hotel Modelo recibió una supuesta reparación
capital y fue reinaugurado a bombos y platillos. Al poco tiempo, sin
embargo, los problemas afloraron y hoy día está más o menos igual que antes.

El papel que jugaban las posadas es asumido hoy por los arrendatarios de
habitaciones en casas particulares. En Holguín se cobra la estadía por
horas. Para los que alquilan es más lucrativo hacerlo así y no por día
de estancia. En Cienfuegos y Santiago de Cuba, el precio de alquiler
diario es de entre 8 y 10 CUC, en dependencia de las condiciones de la
habitación; si tiene disponible equipo de aire acondicionado o ventilador…

En la capital, el precio obedece a las comodidades que se ofertan y la
ubicación. Se cobra más caro en el Vedado, cerca de la zona de los
hospitales Oncológico y Calixto García. También en Playa están los
arrendatarios, situados cerca de la Casa de la Música de Miramar, que
cobran por horas y tienen clientela fija.

En fecha reciente, el Estado autorizó a las empresas que poseen pequeños
o medianos moteles, conocidos como "casas de visita", a ofrecer servicio
de hospedaje a cualquier persona que lo solicite. Las habitaciones
pueden ser alquiladas por días o por horas. El pago es en la devaluada
moneda nacional (CUP).

Sin embargo, en el recuerdo de los mayores perviven aún aquellas posadas
donde muchos descubrieron la magia imperecedera del sexo.

Source: Aquellas posadas | Diario de Cuba -
http://www.diariodecuba.com/cuba/1409267169_10161.html

Thursday, August 28, 2014

Muere una adolescente de 14 años en un derrumbe en Centro Habana

Muere una adolescente de 14 años en un derrumbe en Centro Habana
DDC | La Habana | 27 Ago 2014 - 10:38 pm.

La cubierta de la edificación había sido reparada hace solo ocho meses.

Jennifer Pérez García, una adolescente de 14 años, murió en La Habana
tras el derrumbe del techo de un edificio, informó el periodista
independiente Vladimir Turró Páez.

Los hechos se produjeron el pasado 23 de agosto en el municipio de
Centro Habana. La cubierta de la edificación, en la calle Galeano,
esquina a San Miguel, había sido reparada hacía ocho meses.

Pérez García fue rescatada inmediatamente de entre los escombros, pero
murió antes de llegar al hospital pediátrico Juan Manuel Márquez, adonde
fue trasladada.

Según el periodista independiente, que cita a una trabajadora de la
Dirección Municipal de la Vivienda, en lo que va de año han ocurrido más
de diez derrumbes en Centro Habana.

Source: Muere una adolescente de 14 años en un derrumbe en Centro Habana
| Diario de Cuba - http://www.diariodecuba.com/cuba/1409171894_10143.html

Wednesday, August 27, 2014

72 horas para destruir

72 horas para destruir
LUZ ESCOBAR, La Habana | Agosto 26, 2014

La impotencia y la indignación se han extendido entre los vecinos de La
Timba, del municipio Plaza de la Revolución, uno de los barrios
habaneros afectados por la guerra contra las­ ilegalidades
arquitectónicas que ha emprendido el Gobierno. Durante años, miles de
familias con necesidades habitacionales construyeron añadidos en sus
viviendas, tomaron terrenos baldíos para ampliarse o se fabricaron
improvisados parqueos de autos. Una campaña de las autoridades contra
esta indisciplina social ha puesto en el punto de mira todas esas
irregularidades.

Los inspectores del Instituto de la Vivienda, en colaboración con las
fuerzas policiales, recorren los barrios en busca de esas "ilegalidades"
y, una vez detectada una infracción, entregan una orden al dueño de la
vivienda para que derribe cada centímetro de lo construido sin permiso.
La situación no solo causa malestar en los afectados, sino que pone en
el centro del debate el grave problema constructivo que vive el país.

Se calcula que en Cuba hay un déficit habitacional que supera las
700.000 viviendas. Además, 8,5 de cada 10 viviendas existentes necesitan
reparaciones. Durante el año 2013 solo se construyeron en el país 25.634
inmuebles de los cuales el 47,7% se erigió por esfuerzo propio.

La Habana es una de las zonas con mayores problemas, ya que se calcula
que harían falta unas 28.000 nuevas viviendas para aliviar la situación.

Jazmín tiene 57 años y es responsable de tres nietas adolescentes. Vive
en La Timba, en un apartamento en bajos en la calle 39 junto a su
esposo, que está próximo a cumplir 60 años. Hace unos años, agregó dos
metros cuadrados a su casa tomándolos del jardín común del edificio.
Conscientes de los problemas familiares que la habían empujado a
hacerlo, ninguno de los vecinos se había quejado nunca.

"Vivimos junto al hermano de mi esposo y su padre. Los dos son
alcohólicos", apunta Jazmín. "Son buenas personas pero cuando se
emborrachan se transforman totalmente". Los problemas de convivencia se
agudizaron y, con el tiempo, la familia se vio obligada a dividir la
casa. "Tuvimos que inventar este pedacito para poner el baño y la
cocina", explica señalando hacia una construcción de bloques y cubierta
ligera.

Jazmín se decidió a cometer la ilegalidad arquitectónica después de que
su esposo, que trabajó durante tres décadas en la construcción, pidiera
una casa que no le dieron. La precariedad económica que sufre la familia
le impide comprar una vivienda más grande o alquilar otro espacio a los
parientes conflictivos. "Si nos tumban esto, tendremos que hacer las
necesidades en un cubo", explica. Pero el tiempo para que ella misma
derrumbe las paredes levantadas se ha terminado. Este lunes las fuerzas
policiales y los inspectores habrán puesto fin a su "indisciplina social".

Su caso se repite por toda la zona. María y Juana son dos ancianas de
más de 80 años que han bordeado su propiedad con una cerca de alambre
como mecanismo protector ante los múltiples robos que ocurren en el
barrio de La Timba. A ellas también les dieron solo tres días para
desmontar toda la valla, pero se han resistido a hacerlo ya que tienen
documentos legales que la validan. El Instituto de la Vivienda, sin
embargo, alega que fue autorizado por una ley anterior y por empleados
que ya no trabajan para el Estado.

"Eso fue que se despertaron presionados por alguien de arriba y, como es
más fácil obedecer que cuestionar, aquí están ­­–como dicen ellos–
cumpliendo una orden" puntualiza con ironía la mayor de las ancianas.

En medio de la conversación aparece Gladys, una vecina impulsiva a la
que también le han exigido quitar su cerca y que grita, a voz en cuello,
que no le "da la gana quitar nada" porque la ley dice que todo ciudadano
tiene derecho a proteger su vivienda. Enojada, acusa a un vecino de
haber construido un parqueo asegurando tener permiso por trabajar en la
contrainteligencia militar. "Yo esa no me la trago, no soy estúpida",
asegura.

Los ánimos se caldean y el tiempo corre. En una horas llegarán los
inspectores.

Source: 72 horas para destruir -
http://www.14ymedio.com/reportajes/horas-destruir_0_1622237764.html

Derrumbes continúan cobrando vidas en Cuba

Derrumbes continúan cobrando vidas en Cuba
[27-08-2014 09:44:06]
Vladimir Turró Paez
Periodista Independiente

(www.miscelaneasdecuba.net).- Una niña de 14 años de edad falleció este
23 de agosto después de que se desplomara, sobre su cabeza, el techo de
un edificio en el municipio capitalino de Centro Habana.
La cubierta de la edificación, que se encuentra ubicada en la calle
Galeano esquina San Miguel, había sido reparada 8 meses atrás y, en la
actualidad, no tenía indicios visibles de que estuviera en mal estado,
dijo José Antonio Pompa López, cuidador de automóviles de la zona, que
presenció el hecho.

Jennifer Pérez García se dirigía hacia la tienda a comprarse un par de
zapatos para el comienzo del curso escolar cuando ocurrió el siniestro
accidente, aseguró su mamá Claribel García. A pesar de que fue rescatada
inmediatamente de entre los escombros, por varias personas, la joven
murió antes de llegar al hospital pediátrico Juan Manuel Márquez, a
donde fue trasladada. Durante el rescate la menor convulsionaba aseguró
Pompa, agregando, que no echó ni una sola gota de sangre, lo que produjo
una hemorragia cerebral que la mató instantáneamente, según el
testimonio del doctor, que no quiso ser identificado.

En lo que va de año, solo en este municipio, han ocurrido más de 10
derrumbes, dijo una trabajadora de la dirección municipal de la
vivienda, que prefirió el anonimato y recalcó, que en los mismos, se
lamentaron pérdidas de vidas humanas.

Source: Derrumbes continúan cobrando vidas en Cuba - Misceláneas de Cuba
-
http://www.miscelaneasdecuba.net/web/Article/Index/53fd8c463a682e0e34a85b2b#.U_28j_mSwx4

Tuesday, August 26, 2014

Sin importar la vida de las personas

Sin importar la vida de las personas
[26-08-2014 17:38:21]
Maritza Concepción Sarmiento
Fundación Madres, Familia y Futuro

(www.miscelaneasdecuba.net).- El edificio que se encuentra ubicado en la
calle Máximo Gómez esquina a Pepe Antonio, en el capitalino municipio de
Guanabacoa, está en visible peligro de derrumbe; aunque en los altos hay
varios apartamentos en los que viven familias completas.
No obstante, en la planta baja, hay una tienda en cup (moneda nacional):
"Los Precios Fijos", que vende artículos como colchones para las camas y
ropa reciclada. Este establecimiento es visitado por numerosos clientes.

De igual forma en los bajos, hay un área de ventas, para trabajadores
por cuenta propia con la característica de ser impedidos físicos.

Aunque hay carteles advirtiendo la posibilidad de derrumbe, no están en
una zona visible para los que visiten las tiendas. Pero, lo que no tiene
lugar a dudas es que en un edificio en el cual peligra la vida de sus
moradores, no se debería permitir la ubicación de centros comerciales
que también ponen en riesgo a seres humanos que por desconocimiento van
como clientes a estos sitios.

Los cubanos están acostumbrados a toda esta desidia, pero la
irresponsabilidad debe tener un límite.

Source: Sin importar la vida de las personas - Misceláneas de Cuba -
http://www.miscelaneasdecuba.net/web/Article/Index/53fca9ed3a682e0ba8c73200#.U_y_MPmSwx4